En nuestro día a día usamos constantemente las siglas y los acrónimos para comunicarnos. Al momento de escribir e, incluso, al adquirir algún producto. En algunos casos resulta muy fácil saber cuándo esto ocurre. Especialmente con las que estamos más adaptados. Pero en otros nos resulta a veces difícil darnos cuenta que, en efecto, estamos en presencia de acrónimos y siglas.
Las siglas y los acrónimos tienen diferencias notables. A pesar de que nos parezcan muy semejantes.
Las siglas
Las siglas son palabras creadas a partir de las iniciales de cada elemento principal de un sintagma complejo. Esto significa que para poder hacer referencia a un elemento mayor, se construye una palabra que estará formada con el grafema inicial de cada una de las palabras de la oración que queremos transformar.
Un ejemplo muy conocido de siglas es la palabra ONU. Todos sabemos que significa Organización de las Naciones Unidas. Y esto se debe a que las palabras principales de este sintagma (que son organización, naciones, unidas) aportaron su letra inicial para construir la sigla. Se debe tener en cuenta que las siglas no incluyen dentro de su formación aquellos elementos que no se consideren principales portadores de significado. En el caso de ONU serían las palabras de y las.
Ejemplos de siglas
A continuación, repasamos otros ejemplos de siglas conocidas:
- ACB: Asociación de clubes de baloncesto
- ADN: ácido desoxirribo nucleico
- CPU: Central Processing Unit
- RNE: Radion Nacional de España
- TDT: Televisión Digital Terrestre
- TNT: trinitrotolueno
Los acrónimos
Por su parte, los acrónimos pueden tomar dos formas diferentes. Pueden ser siglas que, por su uso constante, han llegado a ser pronunciadas y usadas como palabras y no vistas como siglas de un elemento mayor. Tal es el caso de las siglas láser y ovni que, aunque aún pueden ser desglosadas y su significado mayor adivinado, se usan comúnmente como palabras con significados independientes.
Otro tipo de acrónimos son aquellos formados por partes de dos palabras. Por lo general, este acrónimo unifica la primera parte del elemento inicial y la última parte del segundo elemento. Para formar, así, una palabra independiente cuyo significado se encuentre en la unión de los dos elementos que la crean. Un ejemplo de esto es el acrónimo motel. Formado por el inicio de la palabra motor y el final de la palabra hotel. En este caso, motel unifica el significado de ambos vocablos para convertirse en uno con significado propio. Es decir, un lugar de descanso para los viajeros que llegan en carro, por ejemplo.
Los acrónimos pueden conformarse por la unión de dos sustantivos, como es el caso del conocido emoticono: de los sustantivos ingleses emotion e icon. También se forman por un adjetivo y un sustantivo, tal como se ve en informática: del sustantivo información y el adjetivo automática.
Ejemplos de acrónimos
A continuación, repasamos algunos ejemplos conocidos de acrónimos:
- Gestapo: nombre que recibía la policía nazi, a partir de Geheime Staatspolizei.
- láser: sigla formada del inglés Light Amplification by Stimulated Emission of Radiation
- FIFA: Federación Internacional de Fútbol Asociación
- IVA: Impuesto al valor añadido
- OVNI objeto volador no identificado
- radar del inglés radio detection and ranging
- RAE: Real academia de la lengua
- PIN: Personal Identification Number. Importante sigla.
- PyME pequeña y mediana empresa, una sigla que incluye dentro de su formación un elemento no principal.
- spanglish (de la unión de spanish y english), entre otros.
- VIP: Very Important Person. Nos encanta esta sigla.
Las siglas y los acrónimos explicados en vídeo
Para acabar, os dejamos con un vídeo ilustrativo de lo que hemos ido viendo. ¿Qué es y cómo funciona un acrónimo? ¿En qué se diferencia de una sigla? Si todavía no te ha quedado claro con el material de estudio, aquí más detalles: